Bueno, ya empezó bien cuando bajé el desayuno a Garfield y acudió a mi llamada, y hasta dejó que le acariciara. En ese rato, los obreros del bloque de enfrente me soltaron algún piropo (deben haber contratado gente con algún tipo de trastorno en la cabeza, en el gusto o en la vista...). Hacía tiempo ya que no me pasaba. Después vi a Félix, para darle unas cosillas, y él me regalo 4 pedazo de limones que no veas... Eso no lo ves en una tienda ni en los carteles.
Después, hice esta foto:
Guapas, ¿eh?
Bueno, la parte mala del día fue que tuve noticias de una amiga, compañera todo BUP y COU... Su negocio ha sido otro de los que ha caído, y se tiene que buscar la vida como comercial puerta por puerta. Ojalá le vaya bien... Estoy segura de que vale para lo que se proponga, además todo lo que sea relaciones públicas, comercial, etc., a ella se le da bien.
Después continuaron las buenas noticias: recogí a Laura en el cercanías, volvía de Alemania, y me estuvo contando su viaje (y dándome envidia, salvo por la parte climática). Nos trajo miles de recuerdos: chalchichas, chocolate blanco para Dani y negro para mí, postalitas, un recuerdo con dibujitos representativos (no sé cómo se llama esto) que tengo ahora mismo a mi lado, y para las niñas un pack de 4 latitas de Sheba. Por la noche dieron buena cuenta de una de ellas.
Mientras ella estaba aquí, trajeron el correo, y una de las cartas era de Hacienda. Qué miedito. Pues nada, al abrirla resulta que mi solicitud de revisión de la declaración de 2008 (por el tema de la minusvalía) ha sido favorable (para mí) y me dan dineritos. Arsa. Viva ZP (preferiblemente fuera de España, pero viva). ¡¡¡El sábado me voy de compraaaaaaaasssss!!!
Al poquito de irse para su casa Laura, vinieron Ayar y Oliver (no estoy segura de que sus nombres se escriban así), vecinos de enfrente y dueños de Garfield. Y nos habían traído un plato de Marruecos precioso. Lo estrenaremos tomando con ellos una fondeu.
Y para rematar, llamé a Paloma para ofrecerle unas camitas muy monas que nuestras gatas no usan... las tías caprichosas... Y hablando-hablando, resulta que a lo mejor nos manda un poquillo de jamón del güeno.
Vamos, que un día cojonudo, con perdón. Con su ciática y su Espondilitis, y aún así cojonudo.
Me alegro de tu buen dia...
ResponderEliminarTe debo una llamada, a ver si busco un momento.
Un besote guapa y a disfrutar de ese chocolate.