viernes, 24 de mayo de 2013

Los capullos no regalan flores


De vez en cuando hay que leer algo fresquito, divertido. Y las cosas que más divierten, al final, son aquellas con las que, de alguna forma, puedes sentir cierto grado de identificación.

Cualquier chica que no se haya casado con su primer-y único-y verdadero amor ha pasado por la experiencia capullil, por lo general (bueno, y algunas de las primeras también). Y aquí están muchas de las formas que adopta un capullo reflejadas de forma realista, pero muy divertida (si lo lees desde la distancia, claro).

La conclusión final a la que llega aquí Moderna de pueblo es bastante común, me atrevería a decir que inevitable.

Entre los tipos de capullo aquí reflejados y analizados (que no están todos los que son, pero son todos los que están) me ha resultado especialmente divertido el capítulo dedicado a los Capullos Coolturetas. He reconocido en este subtipo a varias personas que no tengo muy lejos.

Realiza un minucioso estudio para poder reconocer, con pocas pistas, a cada tipo de capullo descrito, y las previsibles excusas y "faenas" a las que se arriesga una chica que intente un acercamiento... Comportamiento al que, desde luego, da pie la actitud de cazadora que quiere ser cazada que, demasiado frecuentemente, adoptamos muchas tías. Que muchos de ellos son capullos no hay duda; pero que se lo ponemos a huevo, incluso a veces lo buscamos... hay que reconocerlo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Y tú ¿qué opinas?